
Sobre la Agricultura Sostenible en México
En México, la agricultura de pequeños productores bajo condiciones de temporal ha dejado de ser una alternativa viable para la mayoría de las familias campesinas, lo que se traduce en baja productividad, alto costo de insumos, alto índice de siniestralidad, bajo precio de las cosechas obtenidas, migración y la degradación de sus recursos naturales (agua, suelo, diversidad de especies, entre otros).
Ante esta problemática, investigadores del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) se enfocaron en desarrollar cinco componentes tecnológicos que constituyen cinco ejes de sustentabilidad y ayudan a los agricultores a reducir los costos de producción, estabilizar e incrementar su rendimiento por unidad de superficie:
Consolidar un modelo de producción agrícola sustentable en productores de temporal, mediante el fortalecimiento de la organización social de los productores de la región, así como la implementación y réplica del modelo de cinco ejes sustentables.
Milpa en condiciones de temporal
Agrícola
56 hectáreas beneficiadas de forma directa
Fortalecimiento de la organización social para la consolidación de un modelo de producción agrícola sustentable
Municipio de Apaseo el Grande, Guanajuato, México
Organización formal de productores para la implementación de prácticas de producción sustentable.
Consolidar la personalidad de grupo para acceder a más apoyos e interlocución con diversas instituciones.
Desarrollo de habilidades administrativas y de gestión para conseguir sostenibilidad financiera.
Continuar y mejorar el modelo de producción sustentable en beneficio de los productores y la biodiversidad.
Consolidación y fortalecimiento de la organización social por medio del desarrollo de capacidades administrativas y técnicas.
Incremento en la diversidad de sus cultivos, la fertilidad de suelos, implementación de ecotecnias, uso de abonos orgánicos y manejo de plagas.
Replicabilidad de las prácticas a otros grupos de productores de la región.
Intercambio de experiencias y capacitación entre productores (formación de formadores).
Monitoreo: inventario de las razas de maíz y otras especies utilizadas por los productores, monitoreo de especies, indicadoras de aves y polinizadores, así como el monitoreo de suelo.
Fortalecimiento de la cadena de valor: intercambio de experiencias y talleres con grupos con diversos grados de avance.
Medicina alternativa y sustentable.
Cosecha de agua.
Durante los últimos 30 años la agricultura de México ha realizado un manejo inadecuado de los suelos y cultivos que, aunado al uso excesivo de agroquímicos, ha provocado la ruptura de diversos ciclos naturales.
Técnicas agrícolas inadecuadas provocan una disminución de la cantidad de materia orgánica y la pérdida de macro y microporos del suelo, lo que modifica su estructura y disminuye su capacidad de almacenamiento de agua, además de oponer mayor resistencia a la penetración de las raíces.
Durante muchos años el sector agrícola ha invertido en subsidios o incentivos (insumos, equipos, recursos económicos) que fomentan prácticas que no favorecen (e incluso perjudican) los servicios que brinda la biodiversidad a la producción agrícola.
Al irse degradando estos servicios ecosistémicos importantes para la agricultura, los productores deben invertir cada vez más en insumos que les permitan resarcir los impactos de esta degradación (fertilizantes, plaguicidas, equipos de riego, etc.), lo que frecuentemente los arroja a un círculo vicioso de aumento en sus costos de producción.
La agricultura de pequeños productores bajo condiciones de temporal ha dejado de ser una alternativa viable para la mayoría de las familias campesinas que se ubican en estas condiciones de producción. Algunos indicadores de esto son: baja productividad, alto costo de insumos, alto índice de siniestralidad, bajo precio de las cosechas obtenidas, migración y la degradación de sus recursos naturales.
La sostenibilidad implica el uso racional de los recursos, buscando no solo su aprovechamiento actual, sino que sigan disponibles a través de los años. Dada la situación actual, alcanzar la sostenibilidad implica un cambio radical en la forma de pensar y actuar de los agricultores, sustituyendo los métodos convencionales por opciones que permitan a largo plazo recuperar el equilibrio en los agroecosistemas.
Los técnicos de INIFAP y otras organizaciones han acompañado a los productores de Apaseo el Grande desde hace muchos años, los ha capacitado e impulsado a buscar sus propias soluciones a la problemática particular de sus parcelas.
En 2013 el Sistema Nacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (SINAREFI), junto con el INIFAP, iniciaron un programa de capacitación mensual a los pequeños productores de la comunidad de Ojo Zarco en el Municipio de Apaseo el Grande, Guanajuato. Se organizó un banco comunitario de semillas y se formó un grupo de productores custodios de semillas de maíz criollo.
En un inicio muchos productores acudieron a las capacitaciones con la esperanza de recibir un apoyo económico, pero cuando el Dr. Aguirre del INIFAP propuso que cada productor realizara experimentos para conocer las mejores condiciones para su parcela, se empezó a consolidar un grupo de los más interesados en la zona. Con los experimentos se comparaba la siembra “tradicional” con la que aplicó un cambio de práctica respecto a datos de producción de grano y esquilmos. Los resultados en el color y tamaño de las plantas animaron a los productores, pero los resultados en productividad fueron determinantes.
El grupo de productores interesados en seguir implementando las prácticas de producción sustentable que habían aprendido buscó organizarse de manera más formal, pues habían entendido que juntos podían acceder a más apoyos y tener una personalidad propia ante diferentes instituciones.
Con ayuda de la GIZ formaron una Asociación Civil llamada Agricultores en Ejes Sustentables, A.C. (AESAC), una organización llevada enteramente por los productores de Apaseo el Grande. Adicionalmente al desarrollo y consolidación de capacidades técnicas de los productores, AESAC contempla el desarrollo de capacidades administrativas y de gestión. Mediante esta acción se busca generar en los productores las capacidades gerenciales necesarias para lograr una administración eficiente, así como las capacidades para lograr la sostenibilidad financiera de la organización y el acceso futuro a recursos públicos y privados para continuar y mejorar el modelo de producción en beneficio de los productores y la biodiversidad.
Con el tiempo, los productores aprendieron que su parcela tiene necesidades particulares dependiendo de su ubicación, tipo de suelo, condiciones del clima, entre otras cosas, y que las “recetas” que a veces encuentran en los libros no siempre funcionan igual para todos. Esto los motivó a continuar experimentando con diferentes prácticas dentro de los cinco ejes de sustentabilidad que habían aprendido y a anotar las combinaciones que les brindaban mejores rendimientos de producción a menor costo. Esto ha sido el corazón de la experiencia de AESAC.
Aprendieron también a compartir sus experiencias y a dar recomendaciones a otros productores que se resistían al cambio, por lo que pudieron organizar talleres de capacitación incluso en otras comunidades.